Andar con Aníbal de seguro nos traerá signos de optimismo y poesía…
Las palabras signan y determinan. Son como decretos que hacen posible la consolidación de las ideas, los anhelos y las acciones. Y cuando son Nombres propios, llenos de historias y dignidades, pues las palabras son como cuerpos…tal y como lo describiera el juglar de Jaén, Sabina*…en una de sus canciones…se vuelven carne y abrazo, pasos y compañías que nos alcanzan con sus gestas, nos conmueven y nos llenan de regocijo...
Que vos andáis con Aníbal
en la radio están diciendo
y a uno le pone contento
que consideren vital
ver el esfuerzo esencial
de quién nos puso en el alma
frutos de la boreal palma
y su cadencia ancestral
a la inmensidad austral
que busca la justa calma
Un punto gano este premio
que muestra con sensatez
que tienen la lucidez
y que actúa con criterio
pues se da en el hemisferio
cada hecho que desgana
como el de Barack Obama
y el Nobel desprestigiado
tornándose desahuciado
por mucho que otorgue fama
Y es que vos nos abrigáis
con afán de compañera
en la hora mañanera
la memoria despertáis
en la radio dibujáis
el camino hacia el hermano
su poemario cotidiano
y su ancestral voz erguida
con la historia redimida
que nos toma de la mano
Que vos andéis con Aníbal
de extraño no tiene nadad
esde la dulce morada
que a Luz hizo cultural
te sentíamos frontal
loca y bien entusiasmada
coordinando apasionada
el disturbio zaguanero
con Nazoa de prisionero
y de la vida enamorada.
Este amigo amigo entrañable Andrés Hernández escribió estos versos por el premio recibido....y con ellos pude descifrar lo que sentía al recibir junto a otros proyectos comunicacionales y poéticos, este Premio…Es que no es un Premio, es un signo mayor, es saber que andamos con Aníbal, que caminamos con él en este trayecto que una vez el Comandante definió como un camino lleno de trampas, de espinas, de bellezas peligrosas con sillas a los costados que lo invitan a uno a parar…
“Pero, vale la canción buena tormenta
Y la compañía vale soledad
Siempre vale la agonía de la prisa
Aunque se llene de sillas la verdad…” Silvio Rodríguez
Un abrazo a todas y todos, un abrazo anibaldiano, nazodiano….
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